El primer título de la Colección Trece Rosas se propone, de algún modo y sin pretenderlo las autoras, como resultado de la conjunción de sentidos mantenidos hasta entonces por separado, en un balance de la situación del feminismo en la Argentina. En momentos en que la palabra se pone de moda, en el que muchas que se decían tales descubren no haberlo sido nunca o, más común, que quienes pensaban que no lo serían jamás, se encuentran sumergidas en un mar en el que habían nadado siempre, en este preciso momento, es hora de hablar de feminismo con cierta precisión.